Peterhof

Museos

Peterhof es una residencia con la vista maravillosa a la costa, construida por la orden de Pedro el Grande. Este complejo de los museos al aire libre asombra a los visitantes desde la primera vista. Oro brillante de las esculturas y el plateado de los chorros de agua que se disparan de las fuentes casi hasta el cielo – eso es un cuento de hadas que se hace realidad. Los jardines mantenidos con sumo cuidado están llenos de las cosas menos esperadas: los grupos de la música, las cascadas pintorescas, los pabellones acogedores y las fuentes de bromas. Peterhof tiene más de 20 museos para visitar, comenzando con el Palacio Grande – la antigua residencia oficial veraniega – y terminando con una de las primeras estaciones del telégrafo en Rusia. La visita de Peterhof es seguramente una experiencia encantadora para toda la familia.

Por supuesto, mucha gente piensa que el Palacio Grande es indispensable para visitar en Peterhof. Sin embargo, este conjunto de museos se compone de un sinnúmero de pabellones y palacios.

Entre ellos en Peterhof hay:

Monplaisir (Mi Gusto, Mi Placer en francés) el palacio de Pedro el Grande, la residencia privada del zar más modesto en la historia rusa

Edificio del Baño real y las Cocinas (pocos museos en el mundo muestran este lado de la vida de una familia real)

La Tesorería especial (sí, el conjunto de Peterhof tiene su propia Tesorería Especial)

Las Grutas de la Cascada Grande (realmente uno tiene la posibilidad de ir detrás de la cascada principal para ver cómo funciona el sistema de las fuentes)

Los Tours que incluyen Museo de Peterhof

La iglesia de la Resurrección de Cristo (iglesia de la Sangre Derramada)

El templo se construyó como una iglesia conmemorativa en el lugar del acontecimiento trágico: aquí Alejandro II nombrado por el pueblo ruso Libertador fue matado en un ataque terrorista. Y es por eso que los ciudadanos llaman al templo como iglesia de San Salvador sobre la Sangre Derramada.

Siendo un ejemplo fino del estilo neo-ruso, la iglesia de la Sangre Derramada se diferencia de otros edificios del centro histórico de San Petersburgo y atrae a los visitantes por la decoración de sus cúpulas coloreadas y mosaicos de la fachada. A propósito, la iglesia de la Sangre Derramada es el museo de los mosaicos más grande en el mundo entero porque tiene más de 7.000 metros cuadrados de mosaico que reviste sus interiores y exteriores.

A pesar de que gran parte de los viajes a Rusia incluyen visitas a las iglesias, definitivamente vale la pena visitar la iglesia de la Sangre Derramada. Es difícil creer que por dentro es aún más impresionante que por fuera. Es peculiar, y no encontrará nada parecido en ningún otro lugar de Rusia. Cada centímetro está cubierto de mosaicos, sean  Romanos o Florentinos. Los iconos de mosaicos multicolores en las paredes lucen magníficos en los marcos de piedras semipreciosas naturales. El baldaquín especial marca el lugar del asesinato de Alejandro II. Una vitrina separada enseña la etapa de la restauración después del oscuro periodo soviético que fue acompañado por el vandalismo, cuando la iglesia de la Resurrección se consideró como «de ningún valor artístico».

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